Maison Gamboia, 5 chambres d'hôtes de charme et résidence d'artistes, au calme, vaste jardin fruitier
Servicios principales
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Wi-Fi gratis
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Entrada/Salida exprés
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Actividades
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Spa y relajación
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Agradable para niños
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Desayuno
Ubicación
Situado a 4 km del Eglise Saint-Cyprien, el hotel Maison Gamboia, 5 chambres d'hôtes de charme et résidence d'artistes, au calme, vaste jardin fruitier Hasparren se encuentra cerca del Église Saint-Jean-Baptiste. Situado a pocos minutos en coche del Chapelle Notre-Dame de Clairence, este hotel cuenta con 6 habitaciones con vistas al jardín.
Esta pensión está a 10 minutos a pie del centro de Hasparren. El Chapelle du Sacré-Cœur está a unos minutos andando del Maison Gamboia, 5 chambres d'hôtes de charme et résidence d'artistes, au calme, vaste jardin fruitier Hasparren, mientras que la estación de autobuses el Place Harana, está a unos 10 minutos andando del hotel. Visitada por viajeros de todas las creencias, el Eglise Notre-Dame de l'Assomption se encuentra a unos 7 km de este alojamiento. El Maison Gamboia, 5 chambres d'hôtes de charme et résidence d'artistes, au calme, vaste jardin fruitier en Hasparren está a 33 minutos en coche del aeropuerto Biarritz–País Vasco.
Las habitaciones están equipadas con escritorio, así como ventanas insonorizadas para mayor comodidad de los huéspedes. Algunas habitaciones incluyen un baño privado en el que podrás relajarte y utilizar secadores de pelo y artículos de tocador para huéspedes. Las habitaciones del hotel disponen de almohadas blandas o duras antialérgicas, almohadas no alergénicas y almohadas hipoalérgicas. Los cuartos de baño disponen de bañera y ducha, además de secadores de pelo y artículos de tocador para huéspedes.
El Maison Gamboia, 5 chambres d'hôtes de charme et résidence d'artistes, au calme, vaste jardin fruitier cuenta con un desayuno diario continental. El restaurante Restaurant Argia ofrece comida francesa y se encuentra a unos 7 minutos a pie del hotel.
Reseña de un crítico de hotel
Aunque el tiempo no nos permitió disfrutar del hermoso jardín, su decoración artística y acogedora me hizo sentir como en casa. El desayuno, elaborado con productos locales, fue una delicia que nos dejó satisfechos y con ganas de más. Celia, la anfitriona, fue excepcional, siempre atenta y dispuesta a ayudarnos a descubrir la belleza de los alrededores. Sin duda, recomiendo este lugar al 100% para una escapada romántica o para descansar en un entorno idílico. ¡Volveremos!
